Caso Andoas
CULMINARON LOS ALEGATOS
CULMINARON LOS ALEGATOS
DURANTE EL PROCESO HUBIERON HASTA DIEZ SOSPECHOSOS DE HABER MATADO AL POLICÍA
. Técnicamente sospechoso no disparó su escopeta el día de los hechos.
. El jueves de la próxima semana se leerá la sentencia.
INTERLÍNEA-Iquitos, viernes 4 diciembre 2009- Por:Javier Rubén Medina Dávila
Iquitos (Interlínea).- Apelando a jurisprudencia vinculante y a otros argument
os legales, el abogado Víctor Alván Caballero pidió la absolución de todos los delitos que se le imputa al indígena Saulo Sánchez Rodríguez, principal sospechoso de disparar una escopeta de perdigones contra el policía Jaime Reyna Ruiz, fallecido tras el desalojo del aeródromo de Pluspetrol, en Andoas, el 22 de marzo del año pasado.
En su alegato, el letrado procuró desbaratar la acusación fiscal que señala a Sánchez como responsable no solo de homicidio calificado, sino también de lesiones graves, disturbios y violencia y resistencia a la autoridad.
Aunque el procesado declaró durante el juicio oral que llegó a disparar al aire una escopeta obligado por otro indígena, su defensa acudió a una sentencia del año 2005 que un año después fue un acuerdo plenario de la Suprema, ordenando se tome dicha resolución como jurisprudencia vinculante en materia de prueba indiciaria, según la cual el no acreditar con precisión dónde se encontraba el acusado en el momento de los hechos, no permite establecer responsabilidad penal; ni tampoco se le puede acusar de haber disparado un arma si la prueba de absorción atómica no establece necesariamente la presencia de tres elementos: plomo, antimonio y bario.
En el caso de Saulo Sánchez no se estableció dónde estuvo exactamente al medio día del 22 de marzo del 2008, cuando fue herido el policía Reyna, y aunque la pericia criminalística encontró plomo en sus manos, sin embargo no dio positivo para bario ni antimonio. Y respecto al presunto achuar que le obligó a disparar, según el abogado habría sido una mentira de su patrocinado.
Alva recordó, también, que durante la inspección ocular se estableció que el efectivo de la DINOES fue herido en la huerta de la anciana María Dahua Betuna y no por la pista del aeródromo, como sostuvo la policía.
Rechazó, asimismo, que a Sánchez se le pueda acusar de homicidio calificado porque la autopsia reveló que Reyna tuvo “una muerte lenta”, debiendo tipificarse por tanto un presunto delito de lesiones graves seguido de muerte, que cometió alguna persona aún no identificada.
Al respecto, la defensa hizo notar que durante todo el proceso hubieron hasta diez sospechosos de haber cometido el crimen contra el policía y que el único que sindica a su patrocinad es el teniente Pablo Konja, quien vario varias veces sus versiones durante el proceso.
Antes que Sánchez Rodríguez, el mismo 22 de marzo fueron detenidos como presuntos autores de asesinar a Reyna los comuneros Eldibrando Fredy Vílchez Suárez, su hermano Cléver Genrry Vílchez Sánchez y Abigael Nisser Silvano Torres.
Al día siguiente detuvieron a Saulo Sánchez, pero también habían sido sindicados como sospechosos Ulises Chota Dahua, José Marcial Sánchez Dahua y Juan Pablo Gaya Curitiba. Luego surgieron otras personas con apelativos de “Sapo” y “Chapilliquén” y las últimas versiones señalan que habría sido un achuar que huyó al Ecuador.
La versión del teniente Konja se sostiene en que vio a Sánchez pararse y agacharse varias veces para disparar y que estaba vestido con una camisa azul y un pantalón del mismo color. En esa parte el abogado volvió a tocar el protocolo de autopsia en el que precisa heridas bajo la mandíbula, que indicaría que quien disparó estuvo agazapado y no parado, mientras que otros testigos refieren que Sánchez tuvo otras ropas y el propio Konja cambió después a rojo el color de la camiseta que dijo ver.
En opinión de Alva Caballero, el oficial sindicó a Saulo Sánchez como autor del disparo para justificar ante sus jefes cómo ocurrió la muerte de su compañero.
Pese a las pruebas que presentó, las que contradicen los fundamentos de la requisitoria fiscal, el abogado prefirió pedir la absolución de su defendido por la aplicación del principio de indubio pro reo (la duda favorece al reo, en latín), “por cuanto no existe la certeza plena de que él sea el autor del delito”, argumentó.
Alván también representó a los procesados José Sánchez Dahua, Ulises Chota Dahua, Rober Cubas, Abigael Silvano Torres, Eldibrando Vílchez y Cléver Vílchez, para quienes también solicitó la absolución de todos los cargos..
PUNTOS SUSPENSIVOS
La abogada de oficio Rosa Maraví alegó por los no habidos Míner Lancha, Richard Dahua y Admerson Imaina. Recordó que los reos ausentes también pueden ser incluidos en las resoluciones absolutorias.
La sentencia se leerá el jueves.
LA ÚLTIMA PALABRA
Al término de los alegatos, el colegiado preguntó a cada procesado si están conformes con sus defensas. Todos asintieron. También les permitieron hacer sus agregados finales. Estos son algunos.
CLÉVER CRUZ
“Nunca los gobernantes fueron a nuestras comunidades. Solo llegan a la petrolera a comer y tomar. Nos quieren condenar por reclamar, cuando hace 40 años ya nos condenaron a muerte con la contaminación”.
JOSÉ FACHÍN
“Pediremos al Congreso una Comisión de la Verdad para Andoas. Hubo demasiado abuso contra el pueblo. Buscamos inclusión social. Si me condenan iré con orgullo a la cárcel, defendiendo derechos, no como delincuente. Pero a Pluspetrol también deben sancionarla”.
MARCO POLO RAMÍREZ
“Ayúdenos a defender siquiera la tierra que pisamos para el buen vivir de nuestros niños. Quizá mañana ya no estén en Andoas..Quisiéramos que los civilizados nos ayuden a defender lo que defendimos en Andoas y comprendan al pueblo indígena”
MIGUEL ZÚÑIGA
“Vivo en la frontera. Cuando hubo el conflicto con Ecuador fuimos los primeros en salir. ¿Entonces, por qué nos hacen esto? Los indígenas se van a levantar. Ya verán qué va a suceder. No quisiera que se llegue a ese extremo”.
JHONN VEGA
“Construí una empresa con la comunidad y fui juzgado por eso. Para la ley de acá estaré condenado, pero para la de allá estoy absuelto. Me cuestionan por ser profesional. Eso indica que siempre van a discriminar y vulnerar nuestros derechos. Pido respeto”.
TEDY GUERRRA
“Agradezco a Dios por lo que pude vivir y sobrevivir en Iquitos. Las petroleras están cuarenta años y nos niegan hasta un miserable pasaje. Quizá Pluspetrol trata de minimizar lo que regaron otras empresas, pero eso no quiere decir que no haya contaminación”.
MARLIN CUBAS
“Nos amenazan con la cárcel para que quienes tenemos vocación de superación no podamos hacer empresa. Por eso nos quieren encerrar”.
SAULO SÁNCHEZ
“Soy lo suficiente varón para asumir mis responsabilidades. Si yo hubiera matado al policía me hubiera largado al Ecuador”.
DANIEL DAHUA
“Dicen que somos como terroristas, criminales, ladrones. Ellos son los que roban. Pluspetrol me robó mi escopeta. Quiero que me la devuelva”.
VIDAL VALDIVIA
“La gente de la ciudad, las autoridades, no saben nada de lo que pasa por allá. La selva está desapareciendo de verdad y las aguas no se pueden tomar”.
ELDIBRANDO VÍLCHEZ
“Que no hable el idioma y no me vista como ellos no quiere decir que no sea indígena. Vivo en Iquitos porque me trajeron para tener mejor educación y volver para que nuestro pueblo sepa hacer respetar nuestros derechos y no vivamos de las migajas de las empresas”.
FIN
. El jueves de la próxima semana se leerá la sentencia.
INTERLÍNEA-Iquitos, viernes 4 diciembre 2009- Por:Javier Rubén Medina Dávila
Iquitos (Interlínea).- Apelando a jurisprudencia vinculante y a otros argument
os legales, el abogado Víctor Alván Caballero pidió la absolución de todos los delitos que se le imputa al indígena Saulo Sánchez Rodríguez, principal sospechoso de disparar una escopeta de perdigones contra el policía Jaime Reyna Ruiz, fallecido tras el desalojo del aeródromo de Pluspetrol, en Andoas, el 22 de marzo del año pasado.En su alegato, el letrado procuró desbaratar la acusación fiscal que señala a Sánchez como responsable no solo de homicidio calificado, sino también de lesiones graves, disturbios y violencia y resistencia a la autoridad.
Aunque el procesado declaró durante el juicio oral que llegó a disparar al aire una escopeta obligado por otro indígena, su defensa acudió a una sentencia del año 2005 que un año después fue un acuerdo plenario de la Suprema, ordenando se tome dicha resolución como jurisprudencia vinculante en materia de prueba indiciaria, según la cual el no acreditar con precisión dónde se encontraba el acusado en el momento de los hechos, no permite establecer responsabilidad penal; ni tampoco se le puede acusar de haber disparado un arma si la prueba de absorción atómica no establece necesariamente la presencia de tres elementos: plomo, antimonio y bario.
En el caso de Saulo Sánchez no se estableció dónde estuvo exactamente al medio día del 22 de marzo del 2008, cuando fue herido el policía Reyna, y aunque la pericia criminalística encontró plomo en sus manos, sin embargo no dio positivo para bario ni antimonio. Y respecto al presunto achuar que le obligó a disparar, según el abogado habría sido una mentira de su patrocinado.
Alva recordó, también, que durante la inspección ocular se estableció que el efectivo de la DINOES fue herido en la huerta de la anciana María Dahua Betuna y no por la pista del aeródromo, como sostuvo la policía.
Rechazó, asimismo, que a Sánchez se le pueda acusar de homicidio calificado porque la autopsia reveló que Reyna tuvo “una muerte lenta”, debiendo tipificarse por tanto un presunto delito de lesiones graves seguido de muerte, que cometió alguna persona aún no identificada.
Al respecto, la defensa hizo notar que durante todo el proceso hubieron hasta diez sospechosos de haber cometido el crimen contra el policía y que el único que sindica a su patrocinad es el teniente Pablo Konja, quien vario varias veces sus versiones durante el proceso.
Antes que Sánchez Rodríguez, el mismo 22 de marzo fueron detenidos como presuntos autores de asesinar a Reyna los comuneros Eldibrando Fredy Vílchez Suárez, su hermano Cléver Genrry Vílchez Sánchez y Abigael Nisser Silvano Torres.
Al día siguiente detuvieron a Saulo Sánchez, pero también habían sido sindicados como sospechosos Ulises Chota Dahua, José Marcial Sánchez Dahua y Juan Pablo Gaya Curitiba. Luego surgieron otras personas con apelativos de “Sapo” y “Chapilliquén” y las últimas versiones señalan que habría sido un achuar que huyó al Ecuador.
La versión del teniente Konja se sostiene en que vio a Sánchez pararse y agacharse varias veces para disparar y que estaba vestido con una camisa azul y un pantalón del mismo color. En esa parte el abogado volvió a tocar el protocolo de autopsia en el que precisa heridas bajo la mandíbula, que indicaría que quien disparó estuvo agazapado y no parado, mientras que otros testigos refieren que Sánchez tuvo otras ropas y el propio Konja cambió después a rojo el color de la camiseta que dijo ver.
En opinión de Alva Caballero, el oficial sindicó a Saulo Sánchez como autor del disparo para justificar ante sus jefes cómo ocurrió la muerte de su compañero.
Pese a las pruebas que presentó, las que contradicen los fundamentos de la requisitoria fiscal, el abogado prefirió pedir la absolución de su defendido por la aplicación del principio de indubio pro reo (la duda favorece al reo, en latín), “por cuanto no existe la certeza plena de que él sea el autor del delito”, argumentó.
Alván también representó a los procesados José Sánchez Dahua, Ulises Chota Dahua, Rober Cubas, Abigael Silvano Torres, Eldibrando Vílchez y Cléver Vílchez, para quienes también solicitó la absolución de todos los cargos..
PUNTOS SUSPENSIVOS
La abogada de oficio Rosa Maraví alegó por los no habidos Míner Lancha, Richard Dahua y Admerson Imaina. Recordó que los reos ausentes también pueden ser incluidos en las resoluciones absolutorias.
La sentencia se leerá el jueves.
LA ÚLTIMA PALABRA
Al término de los alegatos, el colegiado preguntó a cada procesado si están conformes con sus defensas. Todos asintieron. También les permitieron hacer sus agregados finales. Estos son algunos.
CLÉVER CRUZ
“Nunca los gobernantes fueron a nuestras comunidades. Solo llegan a la petrolera a comer y tomar. Nos quieren condenar por reclamar, cuando hace 40 años ya nos condenaron a muerte con la contaminación”.
JOSÉ FACHÍN
“Pediremos al Congreso una Comisión de la Verdad para Andoas. Hubo demasiado abuso contra el pueblo. Buscamos inclusión social. Si me condenan iré con orgullo a la cárcel, defendiendo derechos, no como delincuente. Pero a Pluspetrol también deben sancionarla”.
MARCO POLO RAMÍREZ
“Ayúdenos a defender siquiera la tierra que pisamos para el buen vivir de nuestros niños. Quizá mañana ya no estén en Andoas..Quisiéramos que los civilizados nos ayuden a defender lo que defendimos en Andoas y comprendan al pueblo indígena”
MIGUEL ZÚÑIGA
“Vivo en la frontera. Cuando hubo el conflicto con Ecuador fuimos los primeros en salir. ¿Entonces, por qué nos hacen esto? Los indígenas se van a levantar. Ya verán qué va a suceder. No quisiera que se llegue a ese extremo”.
JHONN VEGA
“Construí una empresa con la comunidad y fui juzgado por eso. Para la ley de acá estaré condenado, pero para la de allá estoy absuelto. Me cuestionan por ser profesional. Eso indica que siempre van a discriminar y vulnerar nuestros derechos. Pido respeto”.
TEDY GUERRRA
“Agradezco a Dios por lo que pude vivir y sobrevivir en Iquitos. Las petroleras están cuarenta años y nos niegan hasta un miserable pasaje. Quizá Pluspetrol trata de minimizar lo que regaron otras empresas, pero eso no quiere decir que no haya contaminación”.
MARLIN CUBAS
“Nos amenazan con la cárcel para que quienes tenemos vocación de superación no podamos hacer empresa. Por eso nos quieren encerrar”.
SAULO SÁNCHEZ
“Soy lo suficiente varón para asumir mis responsabilidades. Si yo hubiera matado al policía me hubiera largado al Ecuador”.
DANIEL DAHUA
“Dicen que somos como terroristas, criminales, ladrones. Ellos son los que roban. Pluspetrol me robó mi escopeta. Quiero que me la devuelva”.
VIDAL VALDIVIA
“La gente de la ciudad, las autoridades, no saben nada de lo que pasa por allá. La selva está desapareciendo de verdad y las aguas no se pueden tomar”.
ELDIBRANDO VÍLCHEZ
“Que no hable el idioma y no me vista como ellos no quiere decir que no sea indígena. Vivo en Iquitos porque me trajeron para tener mejor educación y volver para que nuestro pueblo sepa hacer respetar nuestros derechos y no vivamos de las migajas de las empresas”.
FIN
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