Por: Blgo. Sandro Chávez
A pesar de las enfáticas declaraciones de la Defensora del Pueblo, de diversos Congresistas como la Sra. Gloria Ramos Presidenta de la Comisión de Pueblos indígenas, Amazonia y Medio ambiente del Congreso de la Republica, La Iglesia, un gran sector del empresariado, entre ellos del sector minero, ONGs, Gobiernos Regionales, entre otros actores, de la urgente necesidad de una nueva Autoridad Autónoma Ambiental en el País, el Gobierno del Dr. Alan García, parece que aun no ha logrado sintonizar con este inevitable pedido.
Mucho mas, cuando el Caso Majas ha puesto al descubierto una vez mas la tremenda desconfianza que hay en los pueblos respecto a quien o quienes deben asumir con seriedad y de manera objetiva la defensa de nuestros Recursos Naturales y del Medio Ambiente, que lamentablemente con el CONAM y el INRENA es definitivamente insuficiente.
Con el gran aprecio que guardo por el Dr. Antonio Brack y con el respeto a sus importantes opiniones sobre lo que a sucedido en el Caso Majas, de las cuales comparto en su gran mayoría, ha dicho algo que es fundamental, lo que se haga o no en la exploración y explotación de parte de la Minera Majaz en la Sierra Piurana “…depende de la supervisión y el cumplimiento de las normas el garantizar que se cumpla y no ocasione daños al medio ambiente”, justamente de eso se trata, mas allá de la polémica de la consulta vecinal y de los apasionamientos de uno u otro lado, es quien le pone el cascabel al gato.
.Y por ello creo que, independientemente de que algunos crean que hay conspiraciones internacionales, grupos antimineros o agitadores comunistas, lo que hay en el fondo es el temor, la desconfianza de la gente a ser engañada nuevamente y por ultimo no cree en el Estado, ni en sus instituciones que los ha tenido olvidados durante largos años.
Para desarrollar al país, no necesitábamos mas crecimiento económico, sino desarrollo económico articulado a una responsabilidad social y a un equilibrio ambiental, que es totalmente diferente, pues es generar mayor rentabilidad económica con mayor justicia social y equilibrio ecológico.
Por tanto, significaba aceptar las inversiones Internacionales y nacionales siempre y cuando estas cumplan con los requisitos de lo que hoy en el mundo se llama Desarrollo Sostenible,
Entonces no es un asunto de oponerse a la inversión, ni nada por el estilo, es un asunto de con que institucionalidad se va a garantizar que los compromisos ambientales en la Minería, del sector Forestal, Pesquero, etc. se van a cumplir, si lo que hoy tenemos como institucionalidad es tan precario e ineficiente que no garantiza ni siquiera su propia existencia.
Creo que lo oportuno es que junto a la nueva etapa de negociaciones que a través del dialogo al parecer se desarrollará entre el Gobierno, los pueblos de Ayabaca y Huamcabamba y la Empresa Minera, es la urgente necesidad de constituir una nueva Institucionalidad Ambiental, que no es solo crear una Ministerio del medio Ambiente y de los Recursos Naturales como Autoridad Ambiental que norme y ejerza como debe ser una verdadera cabeza del Sistema de Gestión Ambiental y que incluya a lo que hoy es el CONAM, INRENA y otras instituciones y oficinas especializadas que están repartidas de manera dispersa en otro sectores; sino que también es clave contar con un Organismo autónomo e independiente que pueda tener la función de fiscalizar y sancionar, de manera tal que no este influenciado por lobbys e injerencias políticas.
Además en el marco de esta nueva Institucionalidad Ambiental, es clave la efectiva regionalización de las funciones y por supuesto el otorgar mejores condiciones en materia de recursos humanos calificados y recursos financieros al Poder Judicial, Ministerio Publico, Controlaría General de la Republica para que ejerzan con prontitud y efectividad las funciones que hoy el país necesita que cumplan.
Solo necesitamos voluntad política de parte del Gobierno y de las demás fuerzas políticas del País para llevar a delante estos cambios trascendentales, no esperemos a que surjan mas conflictos y mas catástrofes ambientales para recién actuar, es mejor prevenir y sentar las bases para una real construcción de un Desarrollo Sostenible para nuestro país.
A pesar de las enfáticas declaraciones de la Defensora del Pueblo, de diversos Congresistas como la Sra. Gloria Ramos Presidenta de la Comisión de Pueblos indígenas, Amazonia y Medio ambiente del Congreso de la Republica, La Iglesia, un gran sector del empresariado, entre ellos del sector minero, ONGs, Gobiernos Regionales, entre otros actores, de la urgente necesidad de una nueva Autoridad Autónoma Ambiental en el País, el Gobierno del Dr. Alan García, parece que aun no ha logrado sintonizar con este inevitable pedido.
Mucho mas, cuando el Caso Majas ha puesto al descubierto una vez mas la tremenda desconfianza que hay en los pueblos respecto a quien o quienes deben asumir con seriedad y de manera objetiva la defensa de nuestros Recursos Naturales y del Medio Ambiente, que lamentablemente con el CONAM y el INRENA es definitivamente insuficiente.
Con el gran aprecio que guardo por el Dr. Antonio Brack y con el respeto a sus importantes opiniones sobre lo que a sucedido en el Caso Majas, de las cuales comparto en su gran mayoría, ha dicho algo que es fundamental, lo que se haga o no en la exploración y explotación de parte de la Minera Majaz en la Sierra Piurana “…depende de la supervisión y el cumplimiento de las normas el garantizar que se cumpla y no ocasione daños al medio ambiente”, justamente de eso se trata, mas allá de la polémica de la consulta vecinal y de los apasionamientos de uno u otro lado, es quien le pone el cascabel al gato.
.Y por ello creo que, independientemente de que algunos crean que hay conspiraciones internacionales, grupos antimineros o agitadores comunistas, lo que hay en el fondo es el temor, la desconfianza de la gente a ser engañada nuevamente y por ultimo no cree en el Estado, ni en sus instituciones que los ha tenido olvidados durante largos años.
Para desarrollar al país, no necesitábamos mas crecimiento económico, sino desarrollo económico articulado a una responsabilidad social y a un equilibrio ambiental, que es totalmente diferente, pues es generar mayor rentabilidad económica con mayor justicia social y equilibrio ecológico.
Por tanto, significaba aceptar las inversiones Internacionales y nacionales siempre y cuando estas cumplan con los requisitos de lo que hoy en el mundo se llama Desarrollo Sostenible,
Entonces no es un asunto de oponerse a la inversión, ni nada por el estilo, es un asunto de con que institucionalidad se va a garantizar que los compromisos ambientales en la Minería, del sector Forestal, Pesquero, etc. se van a cumplir, si lo que hoy tenemos como institucionalidad es tan precario e ineficiente que no garantiza ni siquiera su propia existencia.
Creo que lo oportuno es que junto a la nueva etapa de negociaciones que a través del dialogo al parecer se desarrollará entre el Gobierno, los pueblos de Ayabaca y Huamcabamba y la Empresa Minera, es la urgente necesidad de constituir una nueva Institucionalidad Ambiental, que no es solo crear una Ministerio del medio Ambiente y de los Recursos Naturales como Autoridad Ambiental que norme y ejerza como debe ser una verdadera cabeza del Sistema de Gestión Ambiental y que incluya a lo que hoy es el CONAM, INRENA y otras instituciones y oficinas especializadas que están repartidas de manera dispersa en otro sectores; sino que también es clave contar con un Organismo autónomo e independiente que pueda tener la función de fiscalizar y sancionar, de manera tal que no este influenciado por lobbys e injerencias políticas.
Además en el marco de esta nueva Institucionalidad Ambiental, es clave la efectiva regionalización de las funciones y por supuesto el otorgar mejores condiciones en materia de recursos humanos calificados y recursos financieros al Poder Judicial, Ministerio Publico, Controlaría General de la Republica para que ejerzan con prontitud y efectividad las funciones que hoy el país necesita que cumplan.
Solo necesitamos voluntad política de parte del Gobierno y de las demás fuerzas políticas del País para llevar a delante estos cambios trascendentales, no esperemos a que surjan mas conflictos y mas catástrofes ambientales para recién actuar, es mejor prevenir y sentar las bases para una real construcción de un Desarrollo Sostenible para nuestro país.
